El economista Javier Milei analizó los últimos números de la inflación dados a conocer por el Indec: “el 1.9% es un muy mal dato ya que acaba de superar la meta, porque en lo que va del año se acumula 17,6% de inflación y de mantenerse así hacia adelante nos dejaría una inflación de 25% aproximadamente y con un desvío de 8 puntos con respecto a la meta”, expresó.
Asimismo, dijo que “el dato de inflación del mes de septiembre es malo por la composición del mismo porque cuando se saca el aumento de los precios regulados la inflación estaría en el orden del 9% porque hoy no hay cepo, suben el precio de las tarifas cosa que durante el kirchnerismo no se hacía, entonces hay un montón de cuestiones que analizar y esta tasa de inflación es sustancialmente menor y cuando se limpian los elementos que la hacen comparable lo que da es que hay una inflación de un tercio de lo que había en el kirchnerismo”.
También, señaló que en contra del gobierno y lo que respecta a la inflación de bienes aproximadamente representaba la mitad de la inflación del año y durante septiembre la misma es más del 60% del índice, lo que quiere decir que los datos vinculados a la política monetaria muestran que la inflación se aceleró y tiene un sentido, porque desde el mes de octubre del año pasado el Banco Central cambió su esquema de política monetaria controlando la tasa de interés, lo que hizo que, durante los meses de enero y febrero del año pasado emitiera demasiado dinero creyendo que tenía una mayor demanda de dinero”.
“Fue un error e hizo que la inflación durante la primera etapa del año fuera demasiado alta.”
También aseguró que “el dólar en la Argentina es libre y refleja dos cuestiones: lo que sucede en el mercado monetario que le vale todas las de la Ley como a cualquier bien de la economía y después las cuestiones propias del mercado cambiario que hacen a la oferta y demanda de la divisa y ahí entran cuestiones de índice internacional”.
El economista precisó el error que cometió el Banco Central al inicio del año y que lo reconoce públicamente: “durante el 2016 se evitó una hiperinflación y en la última parte del año se conjuraron tres factores: composición de la demanda de dinero, aumento del mismo y la existencia de la plata que entraba del blanqueo, lo que generó una sensación de que estaba entrando mas plata de lo habitual y el Banco emitió mucho más”.