Un acuerdo con gobernadores peronistas y la promesa de firmar un decreto para abonar un plus de 700 a 750 pesos en marzo y por única vez destrabó la posibilidad de obtener el quórum en la sesión convocada para mañana, con promesa de movilización y protesta de parte de sectores gremiales, sociales y partidos opositores.
El fracaso de la sesión del jueves en la Cámara de Diputados de la Nación es una señal clara de que “la victoria no da derechos”, menos en un país donde la víscera más sensible es el bolsillo y diciembre es un mes complicado para las administraciones nacionales.
Ahora los ministros de Macri reforzaron el acuerdo con varios gobernadores de extracción justicialista y mantienen la esperanza de sentar mañana en sus bancas a 135 legisladores, “o 140” se entusiasman los más optimistas.
Piensan que esa amplia mayoría podrá hacer frente al pulso latente de la calle por la decisión de dirigentes de partidos políticos que van desde el kirchnerismo cerril a la izquierda trotsquista, sumados a los movimientos piqueteros amenazan con copar la plaza frente al Congreso para evitar la sanción de la ley.
Participaron de la cumbre del viernes el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne; el ministro del Interior, Rogelio Frigerio y el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana.
Estuvieron los gobernadores oficialistas María Eugenia Vidal (Buenos Aires), Horacio Rodríguez Larreta (Ciudad de Buenos Aires), Alfredo Cornejo (Mendoza) y Gerardo Morales (Jujuy).
También asistieron los peronistas Juan Manuel Urtubey (Salta), Domingo Peppo (Chaco), Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Rosana Bertone (Tierra del Fuego), y el representante del Movimiento Popular Neuquino Omar Gutiérrez.
El nuevo acuerdo reconoce una compensación diferenciada para jubilados con aportes, pasivos sin aportes y pensiones que le costará al Estado nacional un 5% de lo que se pretende recortar en la inversión previsional con la legislación que se impulsa sin cambios.
Un promedio de 700 y 750 pesos, esta última suma para quienes son jubilados con aportes y que por todo concepto perciban menos de 10.000 pesos. Ese “esfuerzo fiscal” al decir de los voceros del Gobierno, según explicaron desde el Gobierno, alcanza al 70% de los jubilados.
Al nuevo sistema de cálculo de los aumentos que se harán trimestrales y según distintos especialistas bajará las expectativas de incremento de haberes para los pasivos, aunque desde el Gobierno se sostiene que la posibilidad de incremento aventaja en cinco puntos porcentuales a las previsiones inflacionarias que hacen desde el Ministerio de Hacienda de la Nación.
El sistema vigente prevé un incremento del 13,7% para el mes de marzo, en tanto que de aprobarse el sistema propuesto por el Pacto Fiscal ese incremento será de 5,6% ya que se trata de una fórmula compuesta por la inflación (70%) y los salarios (30%) del período junio-septiembre.
De acuerdo a varias consultoras de alcance nacional, de aplicarse el sistema actual el haber mínimo de un jubilado de 7.246 pesos alcanzaría 8.245,95; en cambio con el sistema de la ley en debate ese mismo haber aumentaría a 7.959,02. Y en junio aumentaría otro 5,6%, de acuerdo con estimaciones del Ministerio de Hacienda. Se elevaría recién a mediados del año próximo a 8.088,92 pesos.
Tras el fracaso de la sesión en medio de un escándalo de proporciones y pocas veces visto en el Congreso de la Nación, con agresiones entre legisladores y la sospecha de forzar el quórum con legisladores que no estaban en condiciones de ejercer como tales, el Poder Ejecutivo Nacional obtuvo el compromiso de los gobernadores peronistas de tratar la reforma previsional el próximo lunes, tras la promesa de Cambiemos del pago de un bono especial a jubilados y beneficiarios de Asignación Universal por Hijo (AUH).
Fuente: Epoca