La danza de nombres para reemplazar a Alejandra Gils Carbó en la Procuración General de la Nación acaba de finalizar. La elegida por el Presidente es la prestigiosa jueza Inés Weinberg de Roca, especialista en derecho internacional y derechos humanos, y actual integrante del Superior Tribunal de Justicia porteño.

Macri admitió su nominación durante una entrevista televisiva con Mariana Fabbiani, esta tarde en la Quinta de Olivos. “Sí, la vamos a proponer que sea procuradora", respondió el mandatario al ser consultado por su nominación. Así, se confirmó el anticipo de Clarín, que el 27 de febrero pasado había revelado el nombre de la jurista.

“Confío porque la conocí trabajando. Fue nombrada en el Superior Tribunal de Justicia en la Ciudad y lo hizo muy bien. Espero que haga una tarea de reformas y de modernización de la Procuración en la línea que todos queremos, para tener un Procuración que investigue y que realmente combata el delito”, consignó.

La doctora Weinberg de Roca era una de las candidatas cuyo nombre venía sonando con fuerza desde el alejamiento de Gils Carbó, a fines del año pasado. Aunque se sumó a la Corte porteña en 2013 y por propuesta del Ejecutivo a la Legislatura, la carrera de la jurista alcanzó su máximo desarrollo fuera del país.

Entre 2003 y 2008 fue jueza del Tribunal Penal Internacional para Ruanda, e integró la Sala de Apelación del Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia y del Tribunal Penal Internacional para Ruanda entre 2003 y 2005.

En marzo de 2009 la Asamblea General de las Naciones Unidas la eligió jueza del Tribunal de Apelaciones de las Naciones Unidas, del cual fue la primera presidente.

Alejandra Gils Carbó había sido designada por Cristina Kirchner y fue la cara visible de Justicia Legítima, la organización judicial alineada con el gobierno anterior.

Antes de su partida, Weinberg de Roca había sido jueza de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso, Administrativo y Tributario entre 2009 y 2013, y entre 2000 y 2003; y juez Nacional de Primera Instancia en lo Civil entre 1993 y 2000.

Como su antecesora argentina en los estrados internacionales, Carmen Argibay, la futura jefa de los fiscales -si el Senado aprueba su postulación, con los dos tercios de los votos- también tuvo un rol destacado en la visibilización de la mujer en la justicia, y la defensa de la perspectiva de género en los tribunales.

En 2016 inauguró el coloquio “Empoderamiento y desarrollo de las mujeres en organizaciones”, realizado en Buenos Aires, y entre 2015 y 2017 fue comentadora internacional y panelista de los tres encuentros internacionales “Juzgando con perspectiva de género”, organizados por la Suprema Corte de México.

En noviembre pasado participó de la primera “Cumbre de Juezas y Fiscalas sobre la Trata de Personas y el Crimen Organizado”, convocado por el Vaticano el Papa Francisco.

Actualmente integra el Consejo Asesor del Centro de Desarrollo Económico de la Mujer, del Ministerio de Producción de la Nación y la ONG internacional Million Peace Women.

Cuando comenzó a sonar el nombre de la doctora Weinberg de Roca como candidata a la Procuración, comenzó a circular un mito acerca de su supuesta amistad con el Presidente, supuestamente nacida de sus encuentros en un gimnasio del Barrio Parque porteño. La versión era falsa.

Otra de las objeciones que se escuchaban respecto a su nominación es que la jueza cumplirá 70 años en diciembre de este año.