Jorge Villareal dijo en contacto con La Dos que para ellos “esto era deuda, ahora queremos saber que pasó”. Además, comentó que “su esposa prefiere dejarlo ahí porque para ella esa es la tumba. Yo prefiero reflotarlos, para descubrir que fue lo que pasó”.
Juan Fernando Villarreal nació y creció al ritmo de un padre que rotó destinos según las funciones que le asignaba la Armada. En Ushuaia el joven, que hoy tendía 39 años, hizo parte de la educación primaria.
Una semana antes de la desaparición, los tripulantes se encontraban en Ushuaia, lugar donde Fernando creció e hizo gran parte de la escuela primaria. Desde allí, el Teniente de navío llamó a sus padres emocionado.
"Recordó los lugares donde íbamos cuando vivíamos ahí, nos mandaba fotos de lugares que frecuentábamos, como el correo, los museos. Estaba muy contento y motivado", dijo emocionado Jorge en una entrevista previa.
Fernando es "muy solidario, muy altruista, respetuoso, cada vez que alguien necesita ayuda él se lo brinda", lo describe. "Estamos muy orgullosos por como es él, tiene los valores que tratamos de materializarle", manifestaba su padre.
El submarino ARA San Juan, del que se había perdido contacto junto a sus 44 tripulantes el 15 de noviembre de 2017, fue localizado sobre el lecho marino a unos 800 metros de metros de profundidad en el Atlántico sur.