Después de tres días de intensas gestiones, finalmente mañana habrá servicio de colectivos y trenes. Los gremios de transporte decidieron levantar la huelga sectorial que mantenían los días feriados en reclamo de un alivio en los alcances del impuestos a las ganancias. Con el compromiso de activar mesas de diálogo para buscar una salida a la carga impositiva que pesa sobre los salarios, el ministro de la Producción y Trabajo, Dante Sica , y su par de Transporte, Guillermo Dietrich , se reunieron hoy con dirigentes del gremio de colectiveros de la UTA y los ferroviarios de La Fraternidad. Las negociaciones previas estuvieron a cargo del secretario de Trabajo, Lucas Fernández Aparicio. "No hubo una resolución inmediata para eximir del impuesto a las ganancias los feriados trabajados, pero se buscarán alternativas", dijo a LA NACION un funcionario que participó de las negociaciones. La decisión de levantar el paro generó divisiones entre los transportistas. La UTA y los ferroviarios estuvieron más proclives a negociar e incluso hasta se abrieron de Juan Carlos Schmid, el portuario que oficia de jefe de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT). La CATT inició su reclamo el 1° de mayo pasado y había amenazado con repetirlo todos los feriados. Los transportistas, sin embargo, mantendrán su adhesión al paro general de la CGT del miércoles próximo. En relación al paro nacional del miércoles próximo, Sica dijo hoy en radio La Red que "es un muy raro". Y añadió: "No lo vemos como un momento adecuado, va a generar un mayor perjuicio a todos los trabajadores y las empresas chicas que están poniendo todo para poder superar esta situación". El ministro intentó neutralizar el paro con una visita a la CGT, el lunes pasado. Se reunió allí con Héctor Daer, uno de los jefes de la central sindical. La huelga, que será la quinta en contra de la gestión de Mauricio Macri , se mantiene. De hecho, los gremios lanzaron hoy la convocatoria a través de un video en las redes sociales en el que se enumeran las razones de la protesta: activar un pacto antidespidos; aumento del salario mínimo; congelamiento de tarifas de los servicios públicos; modificar el rumbo del plan económico y paritarias libres.