Sobre esta situación, el secretario de Turismo,?Cultura y Deportes de la Municipalidad, Juan Esteban Maldonado Yonna, contó a República de Corrientes que, ?para la próxima temporada, se prevé un sistema similar a la anterior, con las burbujas?. Pero adelantó que existe la posibilidad de que se permita el ingreso de más personas. En este sentido, el funcionario señaló que ?el proceso de vacunación y el descenso en la cantidad de casos de covid-19 ayuda y predispone a que se pueda trabajar con un cupo quizás mayor de personas?. Desde la Comuna destacan el mecanismo de turnos implementado la temporada pasada, un modelo que terminó siendo imitado por otras ciudades de la provincia y del país. De esta manera, resaltan que, a pesar de las complicaciones sanitarias, la ciudad pudo sostener uno de sus principales atractivos, siempre respetando los cuidados recomendados por la pandemia. Las playas no fueron además un ámbito de contagio, algo que impulsa la posibilidad de una mayor flexibilización este año. Preparativos: El director de Playas y Balnearios, Juan Fernández Xifra, comentó ayer que ?se están haciendo los estudios de batimetría para determinar cuál es la situación del río y de la costa, atentos a que estamos atravesando una bajante muy pronunciada e histórica?. Esperan tener la semana que viene el resultado del análisis y, de esa manera, poder determinar a qué distancia se ubicará el boyado. ?La idea es que sea lo más amplio posible, pero priorizando siempre la seguridad de las personas?, destacó Fernández Xifra. Por el momento, la idea es habilitar las playas como espacios públicos y también el ingreso al agua en todos los balnearios con los que cuenta la ciudad. En el inicio de la temporada pasada el acceso al río estuvo restringido en la playa Islas Malvinas. El director de Playas y Balnearios comentó también a este diario que ya dictan los talleres de capacitación para los guardavidas. ?Van a ser cerca de 50 los que trabajarán en los diferentes espacios y estamos ante la posibilidad de sumar personal para esa tarea?, adelantó. También se alistan los equipos de Guardia Urbana, que son los encargados de controlar el ingreso a los balnearios y el comportamiento en general de las personas. En la temporada pasada no se dieron grandes inconvenientes en este sentido, lo cual es también una señal promisoria para avanzar con la ampliación de los cupos, además del panorama epidemiológico. La intención es repetir una temporada de siete meses, la más extensa del país. De esta manera, la habilitación se daría en octubre y el cierre de los balnearios para ingresar al agua sería a fines de abril, del mismo modo que en los últimos años. De esta manera, Corrientes se prepara para ofrecer sus playas a los correntinos y también a los turistas. Con la movilidad entre provincias prácticamente liberada, apuntan así a recibir a visitantes de otros puntos del país, sumándole además otras ofertas como los espectáculos al aire libre, que prometen ganar terreno desde ahora y durante toda la temporada estival.