El futbolista Sebastián Villa, denunciado por violación e intento de homicidio por una ex pareja, podría ser detenido en las próximas horas, luego de jugar frente a Tigre en el partido que consagró a Boca como campeón de la Copa de la Liga. Luego del encuentro disputado en Córdoba, el delantero podría ser detenido una vez que el plantel "xeneize" regreso a Buenos Aires o bien el lunes durante el entrenamiento, según informó el periodista Juan Cruz Ávila. El viernes se realizó una pericia psiquiátrica a la denunciante. Según Infobae, los resultados determinarán que la mujer no falta a la verdad. En virtud de los resultados, la semana que viene se fijaría un examen psiquiátrico para el acusado. La chica padece un estrés post traumático por violación y presenta un grave daño. Especialistas que escucharon su relato y determinarán si el mismo es veraz. Los profesionales le consultaron sobre los hechos denunciados y sobre su infancia. De esta pericia también participaron peritos de parte, propuestos por la defensa de Villa. Durante el viernes, por otra parte, se esperaba la presentación de la médica ginecóloga que atendió a la joven en el Hospital Penna, dos días después del ataque sexual, para declarar como testigo ante la fiscal Verónica Pérez y su adjunta Vanesa González en la UFI N°3 de Esteban Echeverría. Sin embargo, esto ultimo quedó trunco. Es que la doctora se excusó diciendo que estaba en otra provincia (en Mendoza) y que no podía concurrir. Cuando le solicitaron que prendiera su computadora y encendiera el Zoom para testimoniar por videoconferencia, indicó que se sentía mal. Por lo tanto, la declaración de la especialista se pasará, en principio, para la próxima semana. Aún no hay una fecha confirmada por la fiscalía, pero se cree que será entre lunes y martes. El testimonio de la profesional resulta clave porque la víctima contó que, a 48 horas del abuso, se atendió en el Hospital Penna con la ginecóloga. Además, en las ultimas horas llegó a la fiscalía una confirmación importante. En su relato, la víctima había señalado que un vecino llamó esa noche al 911 por sus gritos. Eso se logró corroborar. Tanto la llamada, como el arribo de los efectivos, quedaron certificados por el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires.