La Asociación Unidos por el Silencio criticó la decisión municipal de liberar la ciudad y quitar los inspectores de ruidos molestos con motivo de los festejos de fin de año. Desde la entidad, su coordinador general Jorge Horacio Echeverz, aseguró que la Comuna se dedicó a controlar solamente el local ubicado en las inmediaciones de las calles Brasil y la avenida Pujol, dejando desolado al resto.
La ONG Unidos por el Silencio reprochó la disposición de la Comuna de focalizar su atención en un solo comercio, dejando al resto de la ciudad desolada, sin móviles de control de sonoridad.
El dirigente expresó además, que durante el 1 de enero hubo personas enfermas y otras recién operadas que no pudieron descansar y tampoco dormir en toda la noche, debido a que sus vecinos la atormentaron con potentes equipos de sonido hasta las 10.30, con la complicidad de la Municipalidad que no acudió a los lugares denunciados para poner freno a la violencia acústica.
Echeverz manifestó que “sabiendo que el ruido domiciliario es el problema más denunciado por los vecinos que viven en Corrientes, no puede ser que en una fecha clave en la que se sabía que iba a existir descontroles con el volumen de la música, el Municipio haya dejado un solo móvil que se dedicó a controlar el local de Brasil y Pujol y haya desamparado al resto de la ciudadanía”.
El titular de la ONG remarcó que la responsabilidad por el agravamiento de la salud de los vecinos por esta causa es responsabilidad de los funcionarios del Municipio de la ciudad de Corrientes, denunciando además que “fue una actitud imperdonable, porque atentó contra la vida y la salud de las personas y el que tomó esa decisión, sea quien fuere, debería renunciar porque incumplió sus deberes de funcionario público y violó a sabiendas el artículo 2, inciso c del Código de Nocturnidad que prohíbe el uso de sonido amplificado en domicilios particulares”.
Respecto de las metas alcanzadas durante el año que recientemente finalizó, Echeverz manifestó que “nada de esto hubiese sido posible sin la intervención del defensor del Pueblo, quien encontró la forma de vincular el ruido con el delito y convocó a representantes municipales, gubernamentales y del Poder Judicial para consensuar un protocolo de actuación, que es ejemplar y único en el país”.
Señaló también el titular de la ONG que Corrientes es la primera provincia que ha legalizado el secuestro de equipos de sonido y va a la cabeza del país en la lucha contra los ruidos molestos.
“A raíz de esto nos han contactado personas de Resistencia, Salta, Formosa, Rosario, Córdoba y Mar del Plata y que en esta última ciudad pudiéramos organizar un movimiento vecinal para luchar contra este flagelo de la modernidad que es la violencia acústica”, subrayó el dirigente.
Además, el principal referente de Unidos por el Silencio informó que recibieron propuestas de escuelas y colegios para dar charlas y concientizar a niños y adolescentes sobre el peligro de escuchar música a alto volumen.
Asimismo expresó que el respaldo que recibe la entidad desde distintos puntos del país y el exterior pone en evidencia “que Unidos por el Silencio ha dejado de ser una coordinadora de vecinos que lucha contra los ruidos molestos en Corrientes, para transformarse en una red que poco a poco va integrando a personas, dirigentes y vecinos de distintas localidades del país y del exterior que ven en ella una herramienta eficaz para aprender, crecer y solucionar sus problemas”.