El juez de Nueva York, Thomas Griesa, llamó ayer a que Argentina y los fondos buitre continúen las negociaciones “de forma continua” a fin de encontrar un acuerdo, y convocó a una nueva reunión entre las partes para mañana con el mediador designado, Daniel Pollack.
Además, Griesa rechazó el pedido formulado por el gobierno argentino de reponer la medida cautelar –stay– para poder concretar el pago a los bonistas, al sostener que “no es algo que sea necesario” para alcanzar un acuerdo entre el país y los fondos buitre. El magistrado, tras instar a las partes a llevar adelante negociaciones “de forma continua”, hizo poner de pie a Pollack –presente en la audiencia– quien confirmó que la nueva reunión se llevará a cabo mañana a partir de las 10 (11 en Argentina) en su oficina del estudio McCarter &English, ubicada en el 245 de Park Avenue.
El encuentro, que se extendió por espacio de más de dos horas, fue convocado por Griesa a partir de solicitudes de “aclaración” presentadas por entidades financieras involucradas en el caso, luego de que el juez decidió congelar el depósito de 539 millones de dólares realizado por Argentina para el pago a los bonistas reestructurados.
El abogado Jonathan Blackman, letrado que representa al país, subrayó durante la audiencia la voluntad de “negociar” que existe de parte de Argentina, y reiteró la necesidad de que la Justicia estadounidense vuelva a ordenar un stay para pagar a los bonistas reestructurados.
Blackman dijo que es “imposible” resolver el acuerdo en las instancias actuales y antes de que el 30 de julio próximo –en siete días– venza el plazo para que finalmente se concrete el pago a los bonistas reestructurados y el país no caiga en default. El abogado también advirtió que el fallo de Griesa obliga al país a pagar al contado la suma de 1.300 millones de dólares más intereses a los fondos buitre y que esa acción daría lugar a una serie de posibles demandas de parte de los bonistas que ingresaron a los canjes de deuda de 2005 y 2010.
Ante este planteo, Griesa sostuvo que el stay “no es algo necesario para negociar un acuerdo” y agregó que los “problemas” que plantean los representantes de Argentina “son susceptibles de manejarse de alguna forma en un arreglo”. De lo contrario, “habrá un default y eso es lo peor” que puede pasar, advirtió el magistrado neoyorquino.
“No quiero que eso pase. La gente va a ser lastimada. No buitres, sino gente real”, agregó el juez al referirse a la posibilidad de que Argentina caiga en default.
Una vez finalizada la audiencia, el fondo NML Capital, propiedad del magnate Paul Singer, emitió un comunicado el que aseguró que están “dispuestos a hacer lo que el juez pidió y a encontrarnos de forma continua con Argentina y con el mediador para resolver esta disputa”. La audiencia comenzó minutos después de las 10.30 (11.30 en Argentina) con la intervención del abogado del fondo Aurelius, Edward Friedman, quien en nombre de los demandantes pidió que fuera revisada la decisión que permitió al Citibank efectivizar el pago realizado por Argentina de bonos bajo ley del país y a bonistas locales.