Jaqueados por los atrasos en los pagos, la devaluación y la inflación, los laboratorios de análisis clínicos advirtieron que 20 días podrían dejar de atender a pacientes con obras sociales o prepagas. La decisión fue comunicada por la Confederación Unificada Bioquímica de la República Argentina (CUBRA), ante los desajustes causados por la inflación y los retrasos en los pagos, dado que estos problemas afectan, gravemente, el funcionamiento de los laboratorios. "La situación es compleja porque hay un montón de factores, uno es que hace dos meses el gobierno nacional puso un impuesto a las importaciones que generó que los laboratorios y muchos sectores de la salud que dan diagnóstico y que necesitan insumos importados, como nosotros con cosas sencillas como agujas y jeringas, les resulte difíciles de acceder", dijo el titular del Colegio de Bioquímicos de Corrientes, Guillermo Duré. "El cupo de exportación, el impuesto país, la devaluación del 22 %, la inflación, hizo que los insumos y los reactivos que tenemos que anejar aumenten como mínimo un 50%. Eso hace que estemos a una situación crítica en los laboratorios", agregó "Se suma que las complicaciones que estamos teniendo con las obras sociales prepagas que la actualización de los aranceles no van acorde a toda esa modificación del porcentaje de devaluación", expresó. El sector advirtió que la desactualización del valor de la Unidad Bioquímica y la demora excesiva en el pago por parte de las obras sociales y prepagas (entre 60 y 90 días de realizada la prestación), ponen a la actividad bioquímica en una situación de enorme inestabilidad y precariedad.