Cuatro jóvenes resultaron heridos, dos de ellos de gravedad, luego de que la camioneta en la que se desplazaban chocara frontalmente contra un colectivo que transportaba una cuadrilla de tareferos por Ruta Nacional N°14, en proximidades a la localidad de Colonia Liebig, informaron fuentes oficiales. Las víctimas volvían desde Virasoro hacia el pueblo yerbatero y según versiones, los primeros informes habían salido de una fiesta, por lo que los peritos creen que el conductor conducía en estado de ebriedad. En capital, varios siniestros viales involucraron a conductores completamente alcoholizados. El accidente más grave ocurrió promediando las 6:45, cuando la Policía recibió la alerta de un choque frontal que involucraba a dos vehículos y múltiples heridos en el acceso a la localidad de Colonia Liebig. Bomberos Voluntarios de ese pueblo y ambulancia locales y de Gobernador Virasoro asistieron para el rescate de las víctimas, mientras la Ruta 14 una vez más se vio interrumpida a causa de un siniestro de estas características. Llovía y la ruta no estaba en buen estado debido a esa situación. Pero para los investigadores, la principal hipótesis en el accidente pudo haber sido la ingesta de alcohol de los ocupantes de la camioneta que volvían a Liebig luego de participar de una celebración por el Día del Trabajador en la ciudad de Virasoro. Y como si fuera un mal chiste del destino, el otro vehículo protagonista fue un colectivo en el que viajaba un nutrido grupo de trabajadores tareferos que se dirigían hacia la zona de yerbal para realizar sus tareas. Según testigos, la camioneta habría "mordido" la banquina, el conductor perdió el control y en su afán por evitar el impacto frontal, el colectivo terminó chocándolos. La camioneta salió despedida para la banquina opuesta, mientras que el colectivo quedó cruzado sobre la ruta y sobre la mano contraria. El conductor y el acompañante de la camioneta debieron ser rescatados por bomberos que cortaron parte de la estructura del vehículo, ya que habían quedado atrapados. Los otros dos acompañantes que viajaban en la parte trasera sufrieron heridas, pero pudieron salir por sus propios medios. En tanto el conductor del colectivo y uno de los trabajadores también sufrieron lesiones, aunque de menor consideración. Fueron atendidos en el lugar. De todos los heridos, el más grave es el conductor de la camioneta, quien sufrió fractura en las dos piernas y en la clavícula; el resto, heridas de consideración. Provocó un choque Mientras tanto, también ayer por la mañana, en la intersección de la avenida Libertad y calle UNNE, justo al frente del campus, chocaron una camioneta Lifan y un Ford Fiesta. Según los datos oficiales, el conductor del primer rodado tenía 1,59 gramos de alcohol en sangre, casi tres veces por encima del valor legal. El impacto fue tal que el Fiesta terminó sobre la vereda de un supermercado y su conductor, quien también registró 0,5 en el testeo de alcoholemia, sufrió con lesiones menores. En este último caso, no fue sancionado porque estuvo al límite de lo permitido. Las dos mujeres que iban de acompañantes resultaron heridas. Huyó de control En otro punto de la ciudad, por calle Rizzuto y avenida Gregorio Pomar, un motociclista terminó derrapando y accidentado luego de huir a alta velocidad de un control de tránsito por calle Ombú y Medrano. Los motivos fueron más que obvios ya que al ser testeado arrojó casi dos gramos de alcohol en sangre en el alcoholímetro. Además del porrazo, terminó detenido por la acción temeraria en la que casi atropelló a los inspectores. Y como si fuera poco, le secuestraron la moto destrozada por choque y se ligó varias multas.