Regatas Corrientes se adueñó del Torneo Interligas en el marco de una final totalmente festiva en el Estadio de los Sueños frente a San Martín, donde Corrientes quedó en lo más alto del básquet. El 29 de septiembre pasará a la historia grande del básquet y del deporte correntino; el Club de Regatas Corrientes conquistó el Interligas 2024 en su casa, en el José Jorge Contte, en un desenlace frente a su clásico rival, San Martín. Más allá del resultado final, ese 71-62 que impuso al remero y lo llevó a alzar el trofeo junto a su gente, la noche que se vivió a orillas del río Paraná fue única. Por eso, repasaremos los acontecimientos más resonantes de una jornada a pura pasión. El estadio colmado La gran final del Interligas prometía mucho porque más allá de ser un duelo que definía un nuevo campeón, tuvo un condimento extra que era el mano a mano entre los clásicos rivales correntinos. Siempre los clásicos son partidos emocionantes y sumamente convocantes, pero en este caso la locura y las ganas de la gente por vivirlo en primera persona superó las expectativas. En total fueron más de 4.500 las personas que colmaron el ya mítico escenario José Jorge Contte para disfrutar de un partidazo. Las entradas para la final se pusieron a la venta en la mañana del domingo y en apenas dos horas agotaron las plateas, mientras que el sector popular hizo sold out con dos horas de anticipación al inicio del juego. Título internacional La coronación en el Interligas le valió a Regatas Corrientes su cuarto título internacional tras las dos Ligas Sudamericanas conseguidas en 2008 y 2012, y la Liga de las Américas conquistada en 2011. Con las cuatro conquistas, el remero se metió dentro del podio de los argentinos con más títulos de esta índole empatando en el segundo lugar con Peñarol y quedando por detrás de Atenas de Córdoba con seis conquistas. San Martín, a la altura En el juego determinante estuvo enfrente el clásico rival, San Martín, que vendió cara su derrota y demostró el porqué de su estadía en el partido para definir al campeón. El rojinegro llegaba invicto con tres triunfos en el Fortín: 77-75 frente a Unifacisa, 85-67 contra Pato Basquete y 72-68 versus Platense. El conjunto de Gabriel Revidatti hizo un buen planteo, y si bien corrió de atrás durante casi todo el juego, nunca bajó los brazos y dio lucha hasta los últimos segundos del partido haciendo que la final sea un espectáculo en todos sus sentidos y que triunfe el básquet.