A poco más de un mes de dejar el cargo, el actual intendente Emiliano Fernández decidió poner en marcha una serie de maniobras con el objetivo de condicionar la gestión de quien lo sucederá, Guillermo de la Cruz. Reducción de impuestos al casino, endeudamiento y cobro de impuestos del 2026 por adelantado son algunas de las mañas que el jefe comunal está aplicando con la complicidad de los concejales del Frente Renovador Virasoreño. En diálogo con República de Corrientes, el intendente electo Guillermo de la Cruz contó: "Hubo una reunión en la que participó el actual intendente con su vice y yo con mi vice. Pedimos información económica y financiera del Municipio, inventarios, saldos de las cuentas, estados de los contratos de locación de maquinarias, dotación de personal". Pero, más allá del pedido y de la necesidad de una transición ordenada, la gestión de Emiliano Fernández no dio siquiera una respuesta parcial y decidió esconder los datos. Además, empezaron a salir a la luz varias decisiones del actual intendente, quien parece no buscar otra cosa más que complicarle la vida a su sucesor y, en definitiva, a sus propios conciudadanos. En el tratamiento de la tarifaria, las tasas no se actualizaron ni siquiera teniendo en cuenta el índice de inflación anual, lo que pone en serio riesgo de desfinanciamiento a la Comuna. Además, en una decisión difícil de comprender, le redujo a la mitad los impuestos al casino. De la Cruz explicó en este sentido: "Ese dinero que se cobra por las máquinas tragamonedas tiene asignado un uso específico: contribuir al hogar de ancianos y la escuela especial 16". A estas decisiones se le suma la falta de transparencia en los fondos públicos, por lo que la gestión que ingrese el 10 de diciembre sigue sin saber con qué se va a encontrar. "Ahora también ofrecen que los ciudadanos paguen todos los impuestos del 2026 por adelantado ya en noviembre", contó el intendente electo. Son varias y para nada menores las señales que está dando Emiliano Fernández, que parece empecinado en recaudar todo lo que puede ahora y desfinanciar el Municipio para la próxima gestión. Hay, al menos, otras dos cuestiones que generan alarma en Virasoro: deuda a pagar el año que viene con varios proveedores y prestadores de servicios y, además, las dificultades que tendrá el nuevo intendente para definir su Presupuesto, condicionado por la Tarifaria.