El portero acusado de intentar abusar sexualmente de una alumna en uno de los baños de la Escuela Normal no se presentó a declarar ayer por la mañana en la Fiscalía de Instrucción Nº 4. No obstante, su asesor legal interpuso un pedido de eximición de prisión para que, al presentarse y ser informado de la imputación en su contra, no sea detenido. NORTE de Corrientes intentó durante la tarde de ayer tomar contacto con la fiscal del caso,

Sonia Meza, para confirmar si solicitó o no la orden de captura del supuesto abusador. La funcionaria dio declaraciones en la mañana mientras esperaba la llegada del imputado y otros testigos, y manifestó que tiene previsto realizar una rueda de reconocimiento para corroborar la afirmación de la presunta víctima que sostuvo haber reconocido mientras caminaba por la calle con su mamá al depravado que la atacó días atrás. Meza también dijo que el sospechoso no tendría antecedentes. “El abogado del personal del instituto terciario solicitó la eximición de prisión", explicó la fiscal de Instrucción 4 ayer por la mañana.

"Es la estrategia que en general tienen los abogados defensores, solicitan previamente a quedar detenido, la eximición”, acotó la funcionaria en declaraciones a la emisora radial LT7. La fiscal Meza subrayó que “como el imputado, que tiene derecho a saber los cargos en su contra y todavía no declaró, no puedo dar a conocer cuáles son”. En dialogo con otra radio local, la representante del Ministerio Público reiteró que el imputado “es un personal que cumple funciones en ese establecimiento, es un personal del instituto terciario”. Seguidamente agregó: “Pedimos informes, que en el transcurso del día seguramente se entregarán”.

“La investigación está en curso, realizamos audiencias testimoniales, está citado el imputado, veremos si se presenta, y sino se tomarán otras medidas para lograr su detención”, aseveró la fiscal respecto a un eventual pedido de captura, el cual todavía no habría sido requerido hasta el cierre de esta edición. La denuncia fue realizada el 7 de julio ante la Dirección de Investigación contra la Integridad Sexual de la Policía. En un principio la familia de la chica, que tiene 13 años y no concurre más al colegio (estudia y hace las tareas escolares en su domicilio), apuntó contra un profesor de Educación Física. Luego la denunciante habría reconocido al sujeto mientras caminaba con su madre por la calle. Con los rasgos esbozados por ambas se confeccionó un identikit del depravado. Copias del boceto fueron pegadas en toda la escuela. Así fue que se habría descubierto que era uno de los empleados de maestranza.