“Está bastante movido, hay una concurrencia tremenda. Anoche conversábamos con los organizadores y hay un promedio de entre unas 12 y 15 mil personas por noche. Realmente hace que todo lo que uno pueda tener previsto en un caudal de concurrencia de más de 7 y 8 mil nos sobrepasa, tanto en lo interno como en lo externo, que es en lo que nosotros tenemos mayor incidencia”, contó el director.
En cuanto a los trámites que realizan los vendedores de alimentos para instalar su puesto en la fiesta, Cánepa dijo que “hay una rutina de trabajo que tenemos y de conocimiento y una relación muy estrecha con todo lo que es la venta ambulante, los muchachos que hacen expendios de comida en la vía pública. La mayoría de la gente que vive de esto sabe que tiene que tener los permisos, que tienen que tener autorización”.
En la fiesta tienen un lugar específico, como explicó el director, “todo lo que es la avenida Sarmiento, la calle Santa Cruz y la avenida Patagonia son prácticamente 200 metros de vendedores que están uno al lado del otro ofreciendo sus productos y nosotros estamos permanentemente controlándolos desde las cinco de la tarde que arranca nuestro control hasta las 4:30 – 5 de la mañana que termina el evento”.
“Saben del control de la documentación que se hace, uno por uno, puntualmente con respecto del estado de lo que ofrecen; ya sea compra de los productos como materias primas y lo que tiene que ver también con la vestimenta, el ordenamiento, todo lo que tiene que ver con la higiene y seguridad alimentaria”, añadió.
“Las cosas están saliendo realmente bien”, anunció Cánepa y prosiguió: “y no solo venimos bien de ahora sino que venimos bien desde hace unos años atrás donde se implementó un nuevo sistema de trabajo y la cosa anda muy bien”. “Da gusto ver a los muchachos bien equipados, bien vestidos y preparados, que fue una lucha; pero hoy verlos con cofia, gorra, chaquetilla, pantalones largos, sin bermudas y sin ojotas. Con una presentación saludable, hay parrillas muy bien armadas de acero inoxidable, muy prolijo”, continuó Cánepa.
“En fin, es valorable la actitud en invertir en este tipo de cosas”, destacó y añadió: “Está saludablemente ordenado de la mejor manera porque saben cómo trabajar”.